Cómo hacer un buen brindis en estas Navidades. Cenas de empresa, reuniones familiares, fiestas de Nochevieja y por qué no, alguna boda. Estamos en el mes del brindis por excelencia. ¿Estás list@ para dar el tuyo?
Por si no lo sabías lo de “brindis” viene del siglo XVI, de la época de Carlos V, concretamente de las palabras de victoria con las que celebraron sus generales la conquista de Roma. Levantando sus copas dijeron algo como “bring dir’s” (en alemán significa “yo te lo ofrezco”). No parece muy romántico el origen, pero al menos, consuela saber que reflejaba emoción y, a su manera, lealtad a su líder.
Tampoco la costumbre de chocar las copas tiene el sentido que hoy le damos. Viene de más atrás incluso, cuando era costumbre en la época romana eliminar a los enemigos envenenando su vino. Para evitar caer en la trampa se hacía chocar las copas con fuerza de manera que el vino de invitado y anfitrión se mezclaban. Si tras este trasvase el anfitrión bebía, no había nada que temer.
La mitología también tiene un capítulo y claro, dónde va a parar, la ficción resulta más suave. Cuentan que el dios Dionisio invitó a otros dioses y a los sentidos (sí a los sentidos, es mitología y por tanto, hay licencia) a un gran banquete. Todos disfrutaban de manjares y sobre todo del vino: el tacto sentía su textura; el gusto su sabores y contrastes; la vista admiraba su brillo y su color; y el olfato enloquecía con los aromas a frutos rojos. Sólo el oído no alcanzaba a disfrutar de ese vino y se quedó triste y apartado. Cuando Dionisio se dio cuenta pidió a los invitados que cada vez que fueran a disfrutar del vino hicieran chocar sus copas para que el oído disfrutara del alegre sonido.
Historias distintas para explicar los orígenes del brindis. Historias que tienen sin embargo cosas en común: encuentros, celebraciones, emociones, sensaciones,… Un brindis es un momento que recoge todo esto. Es la oportunidad de compartir con otras personas un sentimiento o un deseo, y de hacerlo en voz alta, frente a un público. Hasta los que dicen no querer ni saber hablar en público harán en algún momento un brindis (si no es por iniciativa propia, puede que sea el vino o el cava los que les den el empujón necesario).
7 claves para hacer un buen brindis
Algunos brindis los podremos planificar, incluso ensayar y revisar. Otros brindis serán más espontáneos. Un brindis puede ser una sola frase o un breve discurso. Pero si no quieres caer en el tópico de: “¡Todos a una: arriba, abajo, al centro y adentro!” te proponemos algunas claves que te ayudarán a salir del paso.
1- Si puedes, escríbelo antes. En algunas ocasiones podrás incluso leer lo escrito (aquí evita el folio, usa tarjetas con letra grande y frases cortas). Incluso si no vas a leerlo, el haberlo escrito te dará la oportunidad de revisarlo y mejorarlo.
2- Sé breve. Es un brindis no un discurso de graduación. La gente está esperando para levantarse a chocar las copas y beber. Aquí “menos es más”. Si no, fíjate en la divertida iniciativa del Ayuntamiento de Valladolid que ha propuesto un concurso de brindis con la consigna de que tengan como mucho los famosos 140 caracteres de Twitter.
3- Para crearlo puedes usar una de las técnicas de improvisación que proponemos en nuestro curso de “Oratoria + saca lo mejor de ti”. Dale tres momentos: pasado, presente y futuro de la persona o grupo por el que brindas: cómo empezó todo, dónde estáis ahora y qué deseas para el futuro.
4- Recuerda a Dionisio y atiende a todos los sentidos. Incluye en tu brindis palabras que hagan referencia a sonidos, imágenes o sensaciones. Cada uno tenemos una forma de captar mejor la información: despierta nuestro interés.
5- Mantén siempre el contacto visual de todas las personas presentes.
6- Y lo más importante, lo que siempre te vamos a repetir, sé tú mism@: autenticidad. Y si no, que se lo digan a la protagonista de este divertido brindis.
7- Y por supuesto, si el evento te lo permite, ponle tu dosis de humor. Aquí te dejamos un ejemplo brillante donde brevedad; pasado, presente y futuro; autenticidad y humor se combinan a la perfección.
Ahora te toca a ti. ¡Salud!
Artículos mencionados
Si no quieres perderte ninguno de nuestros artículos, puedes seguirnos en Twitter (@coachingfactor) o facebook (@coachingfactoryteam).
Tienes toda la información sobre Coaching Factory en nuestra página web (http://www.coachingfactory.es)
Podemos seguir conversando ¡Contáctanos! CONTÁCTANOS A TRAVÉS DE LA WEB, por teléfono (637 772 983) o e-mail: info@coachingfactory.es
Desde el co-razón de Bilbao
Nota: la imagen corresponde al catálogo de Pixabay, donde se almacenan imágenes y vídeos gratuitos libres de derechos de autor bajo la licencia Creative Commons CC0.
Leave A Comment